Ya ha pasado tiempo desde que se publicara la circular 173 del Harvard College Observatory firmado por Edward C. Pickering el 3 de marzo de 1912. Iba encabezado de la siguiente manera:
"The following statement regarding the periods of 25 variable stars in the Small Magellanic Cloud has been prepared by Miss Leavitt"
[El siguiente trabajo con respecto a los períodos de 25 estrellas variables en la Pequeña Nube de Magallanes ha sido preparada por la señorita Leavitt]
Así eran las primeras líneas de uno de los artículos que cambiaría la concepción de la Astrofísica. El estudio de las posteriormente conocidas como estrellas variables Cefeidas había comenzado gracias a los análisis realizado por Henrietta Swan Leavitt, y aunque no pudo firmar su artículo por su condición de mujer, actualmente se encuentra entre los astrónomos más brillantes.
Figuras 1 y 2: Extractos del artículo original de Leavitt y Pickering. (1) Los períodos se representan en el eje horizontal, expresados en días, y las magnitudes máximas y mínimas, en el vertical. Sorprende la similitud de las curvas de máximos y mínimos. (2) El eje horizontal representa el logaritmo de los períodos y el eje vertical corresponde a las magnitudes.
A través de la Trífida
Como habréis supuesto, hoy hablaremos de Cefeidas. Y para ello pondremos la vista a unos 5.200 años luz en dirección al objeto de Messier número 20, la Nebulosa de la Trífida, objeto muy visitado por telescopios tanto aficionados como profesionales, e incluso por ojos desnudos de quien gozan de buena visión.
Uno de estos ojos que ha fijado su punto en M20 ha sido el telescopio VISTA (Visible and Infrared Survey Telescope for Astronomy) instalado en el observatorio Cerro Paranal de ESO en Chile. Este telescopio ha escrutado la zona en el infrarrojo buscando objetos que pasan desapercibidos en el espectro visible en lo que está siendo uno de los sondeos más grandes del cielo del hemisferio sur.
VVV (VISTA Variables in the Via Lactea), que así se llama el sondeo, está revisando las mismas partes del cielo una y otra vez para detectar objetos cuyo brillo varíe con el paso del tiempo, y ha sido una pequeñísima parte de los datos obtenidos los que se han usado para componer esta imagen:
Imagen 3: Nebulosa de la Trífida, de aspecto débil y espectral vista en el infrarrojo. Créditos: ESO/VVV consortium/D. Minniti.
En luz visible, podemos apreciar en la Trífida los caminos oscuros de polvo que la preceden dividiéndola en tres zonas. Destaca el brillo rosáceo emitido por el hidrógeno ionizado y los tonos azules de luz dispersa procedente de estrellas jóvenes, todo ello entre grandes nubes de polvo que no deja ver lo que hay detrás:
Imagen 4: Comparativa de la nebulosa Trífida en luz infrarroja con una visión en luz visible. Créditos: ESO/VVV consortium/D. Minniti/Gábor Tóth.
El descubrimiento
Y ha sido en el infrarrojo donde VISTA, observando a través del polvo de la Trífida, nos ha dado alguna sorpresa ya que la nube de polvo nos ocultaba un secreto situado más allá del centro galáctico: ha revelado la existencia de un nuevo par de estrellas variables Cefeidas situadas a 37.000 años luz de nosotros.
Imagen 5: Posición de las las dos estrellas Cefeidas recientemente descubiertas. Créditos: ESO/VVV consortium/D. Minniti.
Se cree que este par de Cefeidas, con un período de 11 días, pertenecen a un cúmulo estelar, siendo éstas las únicas detectadas hasta ahora tan cerca del plano central al otro lado de la galaxia.
Imagen 6: Posición de las cefeidas conocidas en nuestra galaxia. Justo encima del centro galáctico se puede apreciar el punto que representa el par de estrellas recién descubiertas. Créditos: Astrophysical Journal Letters/I. Dekany et al.
Seguramente que ni la propia Henrietta pensó que se podrían llegar a descubrir estrellas cefeidas al otro lado del centro de la galaxia. Pero los nuevos instrumentos y la tecnología que llegamos a manejar, lo hacen posible. Dentro de unos años, esto nos parecerá normal...
Los resultados de este trabajo se presentaron en la revista Astrophysical Journal Letters bajo el título “Discovery of a Pair of Classical Cepheids in an Invisible Cluster Beyond the Galactic Bulge”, por I. Dekany et al.El equipo está formado porI. Dékány (Millennium Institute of Astrophysics, Chile; Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile), D. Minniti (Departamento de Ciencias Físicas de la Universidad Andres Bello, Chile; Millennium Institute of Astrophysics, Chile; Vatican Observatory, Ciudad del Vaticano), G. Hajdu (Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Millennium Institute of Astrophysics, Chile), J. Alonso-García (Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Millennium Institute of Astrophysics, Chile), M. Hempel (Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile), T. Palma (Millennium Institute of Astrophysics, Chile; Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile), M. Catelan (Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Millennium Institute of Astrophysics, Chile), W. Gieren (Millennium Institute of Astrophysics, Chile; Departamento de Astronomía de la Universidad de Concepción, Chile) y D. Majaess (Department of Astronomy & Physics de la Saint Mary's University, Canada; Mount Saint Vincent University, Canada).
La imagen 1 es una composición creada con datos del instrumento VIRCAM (VISTA InfraRed CAMera instalado en el telescopio VISTA en los siguientes filtros:
- Banda Infrarroja (filtro J @ 1.25 um)
- Banda Infrarroja (filtro H @ 1.65 um)
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Artículo científico:
Referencias:
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